Son muchos los que se lanzan a iniciar la reforma de su casa durante los meses de verano. Y, lo cierto, es que, por norma general, los meses más calurosos del año son la mejor época del año para hacer la obra que nuestro hogar o negocio necesita. Aquí te contamos algunas de las ventajas que tiene hacer la reforma en verano.
Días más largos
Una de las mayores ventajas que nos ofrece el verano a la hora de hacer una reforma es que hay muchas más horas de luz durante el día. Esto nos va a permitir aprovechar la luz natural durante más horas porque, en caso de tener que cortar la electricidad, cuando se hace de noche, aunque estemos trabajando con focos, el trabajo es más complicado.
Vacaciones, sinónimo de casa vacía
Comenzar una reforma, en ocasiones, es una decisión que vamos aplazando sine die porque suele suponernos cierto trastorno en nuestra rutina y más si la reforma que vamos a realizar es en la casa en la que vivimos o en el negocio en el que trabajamos a diario. El verano es la época del año en la que todos se van de vacaciones, por lo que, en el caso de tener un negocio, serán los meses en los que tengas menos actividad y cerrar no supone unas grandes pérdidas.
En el caso de tratarse de tu casa, si te vas de vacaciones no tendrás que estar a diario conviviendo con unas obras que, aunque seamos muy cuidadosos e intentemos molestar lo menos posible, siempre es molesto convivir con unas obras.
También podrás aprovechar esos días de descanso para poder comprobar a diario cómo avanzan las obras.
Menos molestias a los vecinos
Sí, el verano es sinónimo de vacaciones y casa vacía, pero no solo la tuya. Tus vecinos también se irán para descansar unos días y, así, evitaremos causar molestias con ruidos durante la reforma.
Mejor tiempo
Durante estos meses, el tiempo es estable en todo el país con temperaturas más bien altas. Esto nos va a ayudar a la hora de ventilar la casa o el local tanto durante el día como por la noche ya que podremos abrir las ventanas sin temor a que haga mucho frío.
En cuanto a la humedad, es menor durante el verano. Las lluvias del invierno causan humedades que impiden que se realicen algunos trabajos o se prolongan durante mayor tiempo.
Te recomendamos que en esta época realices también las diferentes reformas para acondicionar el hogar de cara al invierno, es decir, aprovecha para cambiar el sistema de calefacción para que cuando llegue el frío no tengas que echar mano de las mantas, un año más.